Cuando la señalización vial es escasa y el peligro de golpes o atropellos está presente
La carretera ZA-L-2672 se inicia en la N-525 y llega a San Salvador de Palazuelo. Tiene ancho variable desde 6 a 10,7 metros, incluidos los arcenes, y una longitud total de 2.000 metros que transcurre por encima del trazado del AVE Zamora-Orense y de la autovía A-52. El proyecto contempla la actuación en varios tramos que suman en total 1.304 metros.
La actuación ha sido satisfactoria mejorando la pavimentación que estaba ya bastante deteriorada, aunque desde la Asociación Cultural de San Salvador de Palazuelo junto a la Junta Vecinal, hemos tramitado una solicitud y carta (AYTO CERNADILLA[1]) al Ayuntamiento de Cernadilla con el objetivo de mejorar la señalización y la seguridad vial de los conductores, pero sobre todo de los peatones.
El artículo 139 del Decreto 1428/2003, de 21 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento General de Circulación para la aplicación y desarrollo del texto articulado de la Ley sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial, aprobado por el Real Decreto Legislativo 339/1990, de 2 de marzo el cual establece que “corresponde al titular de la vía la responsabilidad de su mantenimiento en las mejores condiciones posibles de seguridad para la circulación y la instalación y conservación en ella de las adecuadas señales y marcas viales. También corresponde al titular de la vía la autorización previa para la instalación en ella de otras señales de circulación.
Habiendo comunicado de forma verbal la situación de peligro en el cruce de Palazuelo con Cernadilla desde la ZA-L-2672 donde hay que tener en cuenta se encuentra en plena curva con escasa visibilidad, además es una zona muy transitada por menores con bicicletas y ya ha habido algún golpe de vehículos y algún susto de atropello.